En Suiza podés elegir cuándo vas a morir.
Dignitas es una clínica en la cual tal como se suele hacer para una intervención de vesícula, túnel carpiano o cesárea, se pauta un día y una hora para que dejes de existir en este mundo.
El denominado suicidio asistido se puede solicitar con algunos pre- requisitos ante la presencia de una enfermedad terminal o una dolencia/discapacidad crónica insoportable. Se evalúa la situación de quien así lo require por escrito, en pleno uso de sus facultades y luego de algunas reuniones, si aceptado, se encaran los preparativos.
Dado que tanto la eutanasia como la muerte asistida se consideran ilegales en muchos países Europeos y en Reino Unido, Dignitas recibe miembros a nivel mundial y argumenta que brinda la información necesaria para quienes deciden poner un punto final a su angustia y desesperación.
El procedimiento consiste en que un médico suizo - todos están autorizados para ello- prescribe un barbitúrico soluble que el paciente tomará para dormirse unos minutos después y morir sin dolor alguno. Listo.
Hemos evolucionado en muchos temas, pero el tabú de la muerte sigue presente como parte de la condición y narcisismo humano. Nadie quiere morir, nadie quiere que los que amamos mueran, pero ciertamente mucho menos queremos que sufran física o emocionalmente mientras esperan el final.
Aunque suene transgresor, a veces la muerte es una solución.
Esta semana Danielle no vendrá a sesión porque tiene un ticket de ida a Zurich y la vuelta será sin su papá.
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